El pasado día tres de noviembre una representación de la delegación de RAECY-Comunidad Valenciana, visitó el Real Monasterio de Santa María de Sijena. Fundado en 1188 por deseo de la reina Doña Sancha de Castilla, esposa del monarca aragonés Alfonso II el Casto.
Acogió tras sus muros a un buen número de reinas y princesas, así como hijas de familias nobles del reino y la corona de Aragón. Sirvió de depósito de una parte del tesoro real y como archivo monástico entre los siglos XIII y XIV. Fue también panteón real sirviendo de lugar de enterramiento de reyes, reinas e infantas de Aragón, destacando la sepultura de la reina doña Sancha o la de Pedro II.
Siendo priora Doña Blanca de Aragón y Anjou, hija de Jaime II, se convirtió en uno de los más importantes cenobios de la Orden de San Juan de Jerusalén en Europa. Entre sus palaciegas estancias destacaba la Sala Capitular, decorada con ricos frescos medievales.
De estilo románico de transición, conserva la estructura de la sala capitular, antiguamente decorada con bellos frescos del románico tardío. La impresionante portada románica con catorce arquivoltas de medio punto se ha convertido en símbolo del patrimonio cultural de los Monegros. Finalizamos la visita trasladándonos a Villanueva de Sijena para visitar la casa-museo de Miguel Servet.
Tras llegar a Zaragoza para pasar noche, fuimos recibidos por nuestros amigos de la delegación RAECY-Aragón, que nos guiaron por una singular y divertida ruta gastronómica por el Tubo zaragozano. Nuestro agradecimiento a María José y Ángel, Carlos y Guillermo, así como a sus esposas.
En la mañana del día 4 giramos una interesante visita cultural guiada por el delegado de Aragón capitán Carlos Delgado Castro, por la Seo del Salvador, Parroquieta y la Basílica del Pilar, en donde rendimos culto a la Patrona de Aragón. Tras agradecerles la fraternal acogida, nos despedirnos de nuestros amigos de Zaragoza, para emprender rumbo a Teruel.
En Teruel, acompañados por el segundo Jefe de la Comandancia de la Guardia Civil, Teniente Coronel D. Alberto Zafra Díaz (que nos acompañó durante todo el viaje), realizamos en la propia Comandancia una comida de hermandad, tras la cual se le hizo entrega de la metopa de RAECY. Posteriormente visitamos las instalaciones de la Comandancia una de las más bellas y completas de España. Finalizando así las dos jornadas de viaje, que nos dejaron a todos un grato recuerdo y fortaleció los lazos de hermandad entre los participantes y amigos de Aragón.